EL CUERPO COMO ORÁCULO
- Florencia Trias
- 24 jul
- 3 Min. de lectura
¿Desde donde elegimos? ¿Elegimos? ¿Cómo ocupamos nuestro lugar?
¿La vida me está enfrentando a una gran crisis. Ando teniendo que hacerme cargo de percepciones que ya tuve hace mucho tiempo.Está tocandome sostener firmemente esas decisiones, que con lo que estoy investigando como coherencia salvaje, una parte mía ya ha tomado, ya ha dedicido
La mente y el cuerpo dialogan en velocidades distintas-
Más, si nos atrevemos a darle cauce al cuerpo, la certeza es total. La mente va a rumear con un millon de pensamientos, excusas y justificaciones, pero finalmente, en el cuerpo va a estar la decisión final. Y creeme, que hasta la mente y los pensamientos se terminan adecuando a la sensación corporal, cuando el cuerpo YA ENTENDIÓ POR DONDE.
¿Te pasa que para decidir escuchas más al afuera, buscas respuestas, oráculos, mensajes ocultos, miles de charlas entre amigas?
Ojo! las charlas entre amigas PUEDEN RE ACLARAR EL PANORAMA. Pero hoy quiero compartirte sobre una metáfora que me dejo pensando

La creencia hacia Eva de que ella precisaba ir a tomar/morder la manzana para encontrarse con el conocimiento y la sabiduría, nos deja una primer imagen mítica, arquetípica, que construye nuestro inconsciente colectivo, en donde el conocimiento viene de afuera. Que nosotras estamos vacías, no sabemos, (encima nacemos de una costilla de un cheibon) y necesitamos ir a en búsqueda de ese conocimiento desde afuera, COMIENDO, ESCUCHANDO, CASO EXTREMO YENDO AL MÉDICO A QUE NOS DIGAN QUÉ Y CÓMO. (No digo que no precisamos de la medicina, sino digo de como ese dispositivo de control de la salud nos ha alienado y alejado de conocernos e integrar una salud más global que implique múltiples áreas de la vida, practicando la soberanía de los cuerpos.)
Adentro de qué te preguntas? Con qué es que percibimos el mundo? Con qué parte de nosotras es que registramos lo que pasa a nuestro alrededor, como nos hace sentir y a partir de ahí tomamos un discernimiento que nos permita decidir?
Será que existe una escucha interna, una escucha profunda y sensibles que nos susurra por dentro? Una voz que nos habita, debajo de todo el murmullo de pensamientos, llenos de terror frente a lo nuevo y desconocido, que este cuerpo, que esta carne nos está contando...
DESCUBRIR TU CUERPO SALVAJE ES MI INVITACIÓN
¿Cómo lo imaginas? ¿Cómo sería un cuerpo salvaje? ¿Qué cualidades lo caracterizan? Yo cuando pienso en un cuerpo salvaje, lo imagino ancho, ocupando lugar, ocupando espacio, con sus caderas anchas y disponibles, con sus sentidos agudizados, con el pecho abierto y un corazón que se siente latir...tal vez sea el cuerpo quién nos puede contar verdades más próximas a nuestra alma y esencia salvaje.







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